Cuando en 1840 en Gran Bretaña se emitieron los primeros sellos, estos estaban imperforados; por tanto a los empleados postales se les proveyó de tijeras que utilizaban para separar los sellos.
Si lo miramos desde la perspectiva actual, el sistema resultaba en extremo engorroso y es la causa de que, solo un porcentaje pequeño de los "penny black" que han sobrevivido hasta el día de hoy estén perfectamente centrados y con sus cuatro bordes y además, de que los ejemplares perfectos alcancen una elevada cotización.
Fue en 1848 cuando Henry Archer, un inglés, inventó la máquina perforadora. Cuando se le propuso la idea a Rowland Hill, a quien todos reconocemos como el inventor del sello postal y que en ese momento desempeñaba las funciones de Director General de Correos de Gran Bretaña, este en principio, no le dio su apoyo pues, y esto siempre de acuerdo a L.A. Williams, Hill tendía a rechazar todo aquello que no hubiera estado enmarcado dentro de las propuestas que dieron originalmente origen al sello de correo.
Afortunadamente, la patente de Archer fue reconocida como la solución al problema de la separación de los sellos y aunque los primeros sellos de la mayoría de los países que emitieron sus primeros sellos antes de 1870 están imperforados, el sistema se impuso como el método más práctico de separar los sellos.
Cuando se comenzaron a emitir sellos perforados, los filatelistas descubrieron que algunos sellos, aparentemente iguales, eran diferentes por tener perforaciones diferentes. Como un medio para conocer esas diferencias, se comenzaron a contar las perforaciones. El método, sin embargo, además de engorroso resultaba inexacto.
La solución la ofreció el filatelista francés Dr. J. A. Legrand, quien inventó lo que hoy llamamos el odontómetro.
Legrand, al tiempo que inventó el odontómetro, estableció la norma de que el número de perforaciones en un sello, era su cantidad en el espacio de dos centímetros.
Los sellos pueden tener el mismo número de perforaciones en los cuatro lados y entonces se dice que son perforaciones sencillas, o estas ser diferentes y en este caso se denominan perforaciones compuestas. Por convención, en las perfocaiones compuestas, el primer número corresponde a las perforaciones en el lado horizontal.
Las perforaciones van desde 5½ (la más vasta) hasta 16½ (la más fina).
Algunos sellos se imprimen en rollo para ser vendidos en máquinas automáticas y solo tienen perforaciones en un sentido. Esos sellos reciben en inglés el nombre de "coil".
Conocer la perforación correcta es importante. El Scott # 543 perforación 10 de los Estados Unidos vale 50¢, pero el mismo sello con perforación 11 vale $18,000.
En la época moderna, pocos sellos se emiten con un método de separación que no sea la perforación; en el siglo XIX en cambio, antes de imponerse el perforado, se usaron otros métodos como el ruleteado y la serpentina. Esta última ha vuelto a ser usada modernamente en los sellos autoadhesivos.
3 comentarios:
Es increíble que alguna vez los sellos no tuvieran perforaciones... no se le puede ocurrir a uno que se cortaran con una tijera.
Creo esta es la mejor forma en la que iré aprendiendo de ese apasionante mundo tuyo y podre compartirlo.
Sigue escribiendo
Hola, Tío!
Que bueno que se ha metido también a estos predios y nos sigue cultivando con tantas informaciones interesantes.
Un abrazo con cariño de su asiduo lector!
Gracias por sus comentarios.
pedrojn desde Helsinki, Finlandia
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