martes, 30 de agosto de 2011

El Túnel Del Tiempo: Falsificadores. Jean de Sperati.

Publicado en el periódico El Caribe, el 7 de junio 1980, Pág. 31

La Filatelia al Día #17

Por Danilo Mueses

¡Qué tal amigos!

La pasada semana les hablamos de las falsificaciones y de los falsificadores.

Les dijimos que el mayor de todos había sido Jean de Sperati. Vamos a hablarles más extensamente de este personaje que es ya una leyenda.

De Sperati se crió en Aix—les Bains en Francia. Desde pequeño sintió aficción por los sellos y cuenta la leyenda de su decisión de dedicarse a la falsificación de sellos surgió de un episodio que le sucedió siendo un niño. Deseando adquirir un sello que le hacía falta y cuyo costo estaba por encima de sus posibilidades, se sometió a una serie de privaciones hasta ahorrar lo suficiente para comprar el sello que tanto anhelaba. Estaba verdaderamente orgulloso de su sello.

Poco después, sin embargo, descubrió con amargura que lo habían engañado y de este hecho surgió su decisión de dedicarse a falsificar sellos.

Sperati fue un indiscutible maestro de las falsificaciones y no alcanzó el lugar de prominencia a que llegó por accidente. Fue un estudioso profundo del proceso y de los materiales envueltos en las fabricaciones de los sellos, tales como papeles, colores, tintas, gomas, grabados, litografía, diseño, perforaciones, etc.

Invirtió en costosos equipos incluyendo lámparas de cuarzo, espectroscopio, cámaras, microscopios, etc.

Durante años, Sperati se burló de los expertos consiguiendo que estos le extendieran certificados de autenticidad a piezas falsificadas por él.

Un episodio sin embargo vino a poner al descubierto su trabajo. Poco después de la II Guerra Mundial, la aduana francesa interceptó un envió que hacía de 18 sellos valiosos con destino a Portugal. Como la exportación de sellos valiosos sin pagar los debidos derechos estaba prohibida, se le llevó a la justicia donde, si resultaba convicto, tendría que pagar una multa de 800,000 francos o ir a la cárcel.

La única forma de librarse a una condena fue declarando que él mismo había fabricado esos sellos.

Se llamó a los expertos y estos dictaminaron que los sellos eran legítimos. Sperati se enfadó y puso sobre la mesa del tribunal un paquete de sellos, mucho mayor.

-¿Quiere usted que le fabrique un centenar de kilos?- propuso

En vista de que con la falsificación de sellos no violaba ninguna ley francesa, Sperati fue absuelto.

En 1952, la British Philatelic Asociation le compró a Sperati por 10 millones de francos las matrices de los 558 sellos que había falsificado y el derecho exclusivo de reproducir sus falsificaciones. En base a estas matrices la BPA preparó un álbum donde aparecen reproducidas todas las falsificaciones de Sperati y se indica cómo identificarlas. Solo así pudieron los expertos sacar a Sperati del negocio de los sellos falso.

martes, 23 de agosto de 2011

El Túnel Del Tiempo: Los Falsificadores - Tarjeta entregada a los 40 años

Publicado en el periódico El Caribe, el 31 de mayo 1980, Pág. 31
La Filatelia al Día (#16)
Por Danilo Mueses
La importancia y difunción de la filatelia ha hecho que muchos sellos, tal como ya lo hemos señalado en otros artículos, alcancen precios fabulosos. Muchos de esos sellos siempre han sido escasos, ya sea porque la tirada fue muy reducida o porque, habiendo circulado en lugares muy remotos, cuando vinieron a ser conocidos en los grandes centros filatélicos de los Estados Unidos y Europa ya se habían agotado en sus países de origen y se habían constituido en grandes rarezas.

Esta situación hizo funcionar el principio del aumento del precio de cualquier mercancía: Una oferta limitada y una demanda creciente. Como consecuencia de esta situación comenzó la falsificación de los sellos que se convirtió durante el siglo pasado en una verdadera plaga.
Afortunadamente, Pronto le salieron al paso los estudiosos quienes publicaron artículos, monográficos y aun libros donde señalaban las características de los sellos legítimos y como detectar los falsos.

Hoja de falsos de Fournier con las diferentes cancelaciones.
Uno de los primeros que comenzó a escribir sobre los falsos fue un clérigo ingles nombrado Robert B. Earee, y comenzó a publicar sus estudios en "The Philatelist", una revista Inglesa, por el año 1871. Por el año 1882, reunió sus trabajos en un libro que título "Álbum Weeds", que vendría hacer algo así como: ‘’ Malas Hierbas del Álbum’’. El libro alcanzó tres emisiones, la última de ellas 1906. El libro "Álbum Weeds" se ha convertido en un clásico y lugar obligado para todo aquel que se inicia en el estudio de los falsos. La crónica negra de los grandes falsificadores llenaría volúmenes enteros. Entre los grandes falsificadores se cuenta Samuel Allan Taylor, J.M. Chute, los hermanos Spiro, Fournier y De Thuin. El mayor de todos sin embargo fue Jean de Sperati, cuyos trabajos no han sido jamás superados.
Afortunadamente, las piezas de bajos precios en general, no son falsificadas. Como una precaución contra las falsificaciones jamás se debe comprar un sello de alto precio si no es a un comerciante conocido que garantice su legitimidad.

Tarjetas entregadas a los 40 años
Mucha gente se queja de que las cartas tardan mucho en el correo y del pésimo servicio. Para consuelos de muchos les contare que el 5 de enero de 1978 el Servicio Postal Canadiense entregó una tarjeta de Navidad que había sido puesta en el correo el 22 de diciembre de 1937, o sea 40 años y dos semanas antes en un buzón de Vancouver.
Aunque no se explican los motivos de la tardanza, los tíos del correo trajeron a colación el cuento de ‘’más vale tarde que nunca’’.

martes, 16 de agosto de 2011

El Túnel Del Tiempo: Unión Postal Universal. Catálogo de Luis Amiama Veloz

Publicado en el periódico El Caribe, el 24 de mayo 1980, Pág. 31

La Filatelia al Día

Por Danilo Mueses

¡Qué tal amigos!

El ciudadano moderno disfruta de una serie de facilidades que ya ha llegado a considerarlas tan naturales como si fueran caídas del cielo. Tal es el caso del sistema que permite que una persona pueda desde aquí, y mediante el pago de una modesta suma, enviar una carta al último rincón del globo. Eso es posible por la llamada Unión Postal Universal (UPU). Vamos a hablarles de esa institución.

Antes de la creación de la UPU, cuando una persona quería desde aquí enviar una carta a Inglaterra, por ejemplo, debía ponerle, además de los sellos dominicanos, los sellos ingleses exigidos por el sistema postal inglés. Si la carta iba a Inglaterra el asunto era menos difícil pues ese país tenía establecida una oficina postal aquí donde se vendían los sellos ingleses pero si la carta iba a otro país el asunto podía tomarse casi imposible.

El primero en sugerir la idea de un sistema que permitiera servir a todo el mundo fue el norte-americano Mongomery Blair quien le propuso en 1862, y en 1863, se llegó a celebrar una reunión en Paris con la presencia de varios países. La Guerra de Sucesión de Estados Unidos y la Guerra Franco Prusiana en Europa impidieron la adopción del convenio.

No fue hasta 1874 cuando por instigación de Alemania se reunieron en Berna los representantes de 22 países y firmaron lo que entonces se llamó Convención Postal Universal y luego Unión Postal Universal. El principio de la UPU es que cada país signatario conviene en transportar dentro de su territorio cualquier pieza postal proveniente de otro país dentro de la Unión. Cada país lleva un registro de cuánta correspondencia recibe de los demás y cuánta es despachada para esa nación. Si al final del año se nota una diferencia apreciable, se hacen reclamos para el pago del excedente.

Hoy en día, prácticamente todos los países del mundo están afiliados a la UPU.

Se publica catálogo de sellos.

Dentro de los actos conmemorativos del 25 aniversario de la Sociedad Filatélica Dominicana, se puso en circulación el catálogo de Sellos postales de la Republica Dominicana editado por el notable filatelista dominicano Luis Amiama Veloz. La obra fruto de años de estudios e investigación, es un trabajo profundo y completo, y cubre en detalle todos nuestros sellos. Su consulta ofrece al coleccionista una mina de información sobre nuestras emisiones no disponible en ninguno de los catálogos foráneos. Lo recomendamos a todos los que coleccionan sellos dominicanos. Su costo es de 7 pesos, y los interesados pueden adquirirlos dirigiéndose al autor, en el apartado postal 274, Santo Domingo, enviando el importe más 50 centavos para gasto de envió.

La Filatelia al Día está abierta a cualquier pregunta o sugerencia. Cualquier correspondencia dirigirse al Apartado 1930, Santo Domingo. (ahora pueden contactar a Danilo Mueses al correo: danilomueses@gmail.com)

martes, 9 de agosto de 2011

El Túnel Del Tiempo: Errores de Diseño

Publicado en el periódico El Caribe, el 17 de mayo 1980, Pág. 31

La Filatelia al Día

Por Danilo Mueses

¡Qué tal amigos!

Es común oír hablando en filatelia de “errores” que se definen como equivocaciones que presenta un sello y que provienen de fallas en la impresión o al grabarlos. Este tipo de error afecta en general a un número muy reducido de ejemplares lo cual hace que la pieza se convierta en una rareza y alcance precios extraordinarios. Tal fue el caso del primer sello aéreo de Estados Unidos, del cual se descubrió una plancha de 100 sellos con el centro invertido. Recientemente, un block de 4 sellos de este error fue subastado en $500,000.

Vamos hoy sin embargo a hablarle de otro tipo de error y el cual afecta a todos los sellos de una emisión y que son errores que mueven a la curiosidad o a la risa.

En 1920 las islas de Saint Kitts y Nevis en las Antillas Menores emitieron un sello de ½ penique en el cual aparece Colón a bordo de su nave con un catalejo. Como ese artefacto no fue inventado hasta el 1609 por Galileo, o sea 103 años después de la muerte de Colón, se comprende lo risible del error.

En 1932, Filipinas emitió una serie de sellos mostrando diferentes vistas del país. El sello de 18 centavos de esa serie pretendía mostrar las cataratas de Pagsajan; sin embargo, parece que el viñetista encargado del grabado no tenía a mano una fotografía de dichas cataratas y diseño el sello en base a una de las cataratas de Vernal en el Parque Nacional de Yosemite.

Otro error curioso apareció en Alemania en 1956 cuando se emitió un sello conmemorando el centenario de la muerte del compositor Robert Schumanm. En el sello se reproduce un retrato de Schumanm y un fragmento de lo que se supone sea una de sus composiciones. Un curioso descubrió que el fragmento reproducido correspondía a una pieza de Shubert.

Nota de nueva emisión de Sello:

El 18 de Abril pasado (1980), dentro de los actos conmemorativos del 25vo. Aniversario de la Sociedad Filatélica Dominicana se emitió un sello de 10 centavos aéreo. El sello fue obra del notable dibujante Nelson Davila y fue impreso por la Editorial Padilla en pliegos de 50 sellos. Se emitieron en total 200,000 ejemplares.

Los sellos fueron autorizados por Dec. No. 1688 del 9 de abril de 1980.