viernes, 26 de febrero de 2016

El Túnel del Tiempo de la Filatelia: Espamer 82

27 de noviembre 1982
La Filatelia al Día
Por Danilo A. Mueses

Del 12 al 17 del pasado mes de octubre, un grupo de filatelistas dominicanos asistimos a San Juan de Puerto Rico a la que ha llegado a ser la mayor exposición filatélica en toda América Latina y España y son las exposiciones ESPAMER.

Un grupo expuso, otros fueron simplemente a admirar las colecciones, hubo quien fue como comerciante y al autor de la exposición.

La experiencia ganada por todos fue extraordinaria pues la calidad de las colecciones expuestas fue en todo sentido de primera.

Para los aficionados a las cifras les diremos que había en total 260 colecciones ocupando 1,920 marcos y cada marco con 12 páginas o sean en total más de 23,000 páginas. El valor conjunto de los sellos y otras piezas filatélicas expuestas sobrepasaba los $16 millones de dólares!
Sin embargo lo allí expuesto, lo que todos pudimos ver y admirar va más allá de lo que podría indicar las frías estadísticas pues para todos, esa exposición  fue una lección  viviente sobre filatelia.

No podríamos decir que cada colección fuese un modelo porque, aunque el nivel de lo expuesto era en general bastante elevado, había de todo, aún aquello que sólo podría tomarse como modelo de cómo no debe montarse una colección.

Sin embargo, todos pudimos admirar algunas de las colecciones más excepcionales de América y Europa y comprender y aprender,  que una buena colección es algo más que una acumulación de piezas valiosas o escasas, que una colección ganadora requiere de trabajo continuo y sostenido, del estudio, de la investigación.

Al regresar todos hemos traído valiosas experiencias, aún aquellos que regresaron con un premio menor que el que creían merecer porque como decía alguien, tanto se aprende de los fracasos como de los triunfos.

Y en cuanto a la actuación de los dominicanos, podríamos decir que nos sentimos altamente argullosos del papel desempeñado. Hay que reconocer que el nivel de nuestras colecciones en general no estaba a la altura de las grandes colecciones allí mostradas pero hay que mirarlo no desde esa perspectiva sino recordando que esas colecciones fueron las mismas que se expusieron en la exposición  domínico-puertorriqueña que celebramos aquí el pasado año y les podemos asegurar que el nivel alcanzado en el montaje, en la presentación, ha demostrado claramente y sin que nos quepa duda alguna, que estamos progresando.

El espléndido Centro de Convenciones de San Juan de Puerto Rico se vistió de gala para mostrar al mundo, el poder de una simple estampilla como vehículo de cultura y vinculo de amistad y confraternidad entre los pueblos de estas América, grande y hermosa.

En esos días tuvimos la ocasión de intercambiar ideas, de conocer figuras señeras dentro de la filatelia interamericana y se departir con colegas en un ambiente campechano e informal. Allí reunidos, nos sentíamos todos más hermanos porque la filatelia salta por encima de las barreras idiomáticas, de nacionalidad, raza o cultura  y nace que todos los presentes se confundan en un estrecho abrazo y al despedirnos en todos los labios sólo había sonrisas y una promesa de volvernos a reunir en ESPAMER`83.

miércoles, 17 de febrero de 2016

El Túnel del Tiempo de la Filatelia: Sellos Conmemorativos (Parte II)

20 de noviembre de 1982
La Filatelia al Día
Por Danilo A. Mueses

Son muchos los sellos que han disputado a la emisión colombina norteamericana el honor de ser la primera emisión conmemorativa.

Así, por ejemplo, se ha señalado que la serie de valores emitida por Rumanía (Scott N106/12) en 1891 para conmemorar el Jubileo de Puerto Plata del Rey Carol I es anterior en más de un año a la serie norteamericana.

Hay otros que hurgando en los catálogos han ido más atrás y señalan que en 1888 en Frankfurt, Alemania se emitió un sello que aunque tenía carácter local, fue emitido para conmemorar un congreso filatélico celebrado ese años en esa ciudad. En la misma ciudad de Frankfurt fue celebrado en julio de 1887 un concurso de tiro al blanco y se emitió con ese motivo otro sello que precedió al anterior y el cual conmemora el Noveno Concurso Alemán de Tiro, que muchos consideran el primero.

Muchos sin embargo, han señalado que los sellos alemanes tenían carácter local y que la primera emisión conmemorativa corresponde a los sellos emitidos por Nueva Gales del Sur en 1888 para conmemorar el primer centenario del primer asentamiento británico en Australia. Aunque muchos le han negado el carácter conmemorativo a la emisión, es evidente que lleve la inscripción “on hundred years” lo cual es suficiente evidencia.

Sin embargo, otros que han querido hurgar aún hacia atrás han alegado que a los sobres de 3 centavos con los sellos estampados emitidos por los Estados Unidos en 1876 le corresponde el honor. Aunque su naturaleza conmemorativa es innegable (llevan las fechas 1776) habrá que decidir si dado su carácter de sobres podrían reconocerse como predecesores de los sellos australianos.

Hay, no obstante, muchos que señalan que el primer sello conmemorativo del mundo no es ninguno de ésos y que el  campeón indiscutible es el sello emitido por Perú en 1871 para conmemorar el 20 aniversario del primer ferrocarril de Sud América, uniendo a Lima, Callao y Chorrillos. Los opositores del sello de Perú alegan que aparte de la locomotora y los nombres de las tres ciudades, no hay nada en el sello que indique su carácter de emisión conmemorativa.

¿Es válido tal planteamiento? A nuestro entender no. Creemos que lo fundamental es la decisión de las autoridades postales del Perú al autorizar la emisión. Si cuando se ordenaron los sellos se planteó que se hacía celebrando el vigésimo aniversario del ferrocarril, poco importa que no se usara la palabra conmemorativo u otro similar. Es la presencia lo que cuenta, el “yo estaba allí”, no importa que no quede acta o constancia del hecho.

En conclusión, a nuestro entender, el privilegio de ser el primer sello conmemorativo del mundo le corresponde al sello del Perú.

Hoy en día, sin embargo, las emisiones conmemorativas se han convertido en un lugar común en la política de emisiones de la mayoría de los países y lo que antaño fue una novedad, hogaño es algo cotidiano que pasa desapercibido para la generalidad de los coleccionistas a los cuales parece importarles poco  que una emisión sea o no conmemorativa.


Consideramos que con el curso que van tomando las cosas, la novedad serán las emisiones definitivas las cuales cada día son más esporádicas.