11 de septiembre de 1982
La Filatelia al Día
Por Danilo A.Mueses
El primer sello de correo, nacido el 16 de
mayo de 1840 como resultado de las ideas revolucionarias de Rowland Hill,
impulsó el desarrollo de las
comunicaciones hasta niveles jamás soñados, aún por más ardientes propulsores.
Esto no significa en modo algunos que antes de
1840 no existiese un servicio de correo, cuyo origen se pierde en la noche de
los tiempos. Esos servicios postales estaban bastante desarrollados y muchos
filatelistas, buscando caminos no trillados, se han dedicado al coleccionismo
de las piezas postales cursadas a través de esos sistema de correos, lo cual ha
dado origen a lo que se conoce como prefilatelia y que se define como el
estudio y coleccionismo de las marcas postales anteriores a la implantación de
sello adhesivo.
En nuestro país, y en general en casi toda
Latinoamérica estas piezas son sumamente raras y costosas pero en Europa este
tipo de material es muy abundante y aunque
existen piezas muy costosas, se pueden conseguir miles de piezas cuyo costo es
de menos de $5,00 cada una. Esto ha hecho que muchos coleccionistas hayan
decidido orientar su afición hacia este tipo de piezas. Las marcas pre filatélicas
están comprometidas fundamentalmente en cinco clases o grupos que son: de
origen, de tránsito, de porteo, de destino y fecha. Vamos a explicarles
brevemente en qué consisten una de esas marcas.
De Origen. La correspondencia originada en una
ciudad llevada un sello gomígrafo que podría llevar diferentes informaciones
pero que en la generalidad de los casos se limitaba al nombre de la ciudad y la
fecha.
De Tránsito. Cuando una carta llegaba a una
ciudad en tránsito hacia otra llevaba muchas veces la marca de esa ciudad.
Estas marcas de tránsito se siguieron usando aún después de la implantación de
sello postal adhesivo pero hoy apenas se usan.
De Porteo. En la época anterior al sello
postal, el porte lo pagaba en general el destinario. Sin embargo, en el caso de
pagarlo el remitente, este pago quedaba consignado en la cubierta dando origen
a las marcas denominadas “de porteo” A veces la marca de porteo indicaba cuánto
debía pagar el destinario.
De Destino. Al llegar a su lugar a su lugar de
destino, la carta recibía una marca indicando como regla general, únicamente el
nombre de la ciudad.
De Fecha. Como su nombre lo indica, son marcas
que señalan la fecha en que despachó la carta.
Las piezas pre filatélicas no pueden
coleccionarse sino la pieza entera y la popularidad de estas colecciones está
creciendo y entran dentro de lo se conoce como “Historia Postal”. Cabe señalar
que toda pieza pre filatélica cae dentro de lo que llamamos historia postal pero
no toda pieza de historia postales es pre filatélica.
En algunas exposiciones filatélicas los
cultores de la prefilatelia estaban tomando un auge tal que muchos
coleccionistas tradicionales estuvieron
estudiando medidas para limitar la participación de las colecciones de
prefilatelia pues señalaban que si los que se coleccionan son sellos, la
prefilatelia es historia del correo y por tanto debe excluirse de las
exposiciones.